Identidad y Tradición

Robert Shippee y George Johnson a fines de los años 20 durante un levantamiento aerofotográfico observan un valle al que llaman "Desconocido Valle de los lncas" al año siguiente a organizan una expedición a la zona, improvisando un aeropuerto en el pueblo de Lari, luego de las primeras mediciones del cañón caen en la cuenta de que es dos veces más profundo que el cañón del Colorado.

Conocido como corregimiento Collahuas, el valle del Colca,fue una de las zonas más importantes durante la colonia. Francisco Pizarro encomiendó a su hermano Gonzalo, que se establezca en Yanque para ejercer el control del Valle. En aquella época se calcula una población de 60 mil personas dedicadas a la agricultura, la producción fundamental maíz, patata además de otros productos que sustentaban toda esa población.
Esta zona, protegida y a su vez aislada por los grandes macizos de la cordillera de los Andes, estableció relaciones comerciales con pueblos de la costa en un ritual, de trasfondo económico que aseguró una justa combinación de productos de diversas regiones para la alimentación.
Una expresión de sus logros culturales son los bordadores del Colca, los únicos que se especializan en un trabajo tradicional con máquina de coser. La complejidad de diseños y técnicas de sus trajes son el tema de una nueva propuesta del Museo Nacional de la Cultura Peruana. La iconografía de la región se compone de figuras se rellenan con hilos de colores diferentes a los usados en los contornos. Línea por línea se colorean las aves, flores, vizcachas, peces y más símbolos caracaterizan a estos bordadores.
Así como sus trajes, el complejo repertorio musical representado por sus danzas, sorprende por su contenido histórico y social, los bailarines cuentan con sus representaciones, las vivencias de su pueblo a lo largo de la historia.